Francia

Europa

ciudad: Burdeos

Valoración: ★ ★ ★ ★ ★

En Aquitania, a la orilla del Atlántico, en el entorno de la desembocadura del Garona, se halla una de las ciudades más importantes de Francia, por su economía, demografía e historia: Burdeos.

El patrimonio artístico de Burdeos es importante y está referido de forma especial a los siglos XVIII y XIX. La catedral de San Andrés es el más destacado de los antiguos templos de la ciudad y el Gran Teatro es un orgullo para sus habitantes.

Burdeos además de ser una hermosa ciudad, es la capital de la región de uno de los vinos más famosos del mundo. También es una de las ciudades más importantes al sureste de Francia, su clima suave y su historia rica en acontecimientos hacen que este sitio sea un interesante lugar para explorar.

Buena parte del centro de la ciudad está constituido por grandes parques bien cuidados, calles y edificios de gran elegancia del siglo XVIII, decorados con balcones de hierro, muchos de los cuales se han restaurado con su color original con tonos miel. El triángulo formado por el Cours de la Intendencia, Cours Clemenceau y Allées des Tourny cuenta con grandes boutiques y cafeterías.

El centro de la ciudad puede recorrerse fácilmente a pie así como sus atracciones turísticas más cercanas, como tiendas y restaurantes que sirven platos locales acompañados por los estupendos vinos locales. La ciudad tiene un gran número de museos, una buena vida nocturna comparable a la de París y hermosas playas cerca listas para el verano.

Algunos lugares de interés:

Barrio de San Pedro. Es el centro neurálgico de la ciudad, además de su centro histórico, con hermosas calles. Es la capital culinaria de Burdeos, ya que cuenta con un gran número de restaurantes para todos los gustos y bolsillos. La Plaza del Parlamento tiene una arquitectura maravillosa y una fuente ornamental. También en la zona está la Iglesia de San Pierre, construida en los siglos XV y XVI, donde estaba antes el puerto galo-romano.

Barrio de Chartrons. Situado a orillas del Garona, fue el barrio donde durante siglos los comerciantes y empresarios se codeaban con marineros y trabajadores para negociar el vino de Burdeos. Con la caída del comercio en el río, el barrio se vació, convirtiéndose en una zona residencial tranquila con tiendas de antigüedades. Una parte del barrio se conoce hoy en día como «la ciudad de las antigüedades» y uno de esos lugares de visita obligada es el Museo de Chartrons, donde se aprende a comprender el fascinante mundo del almacenamiento, envasado, embalaje, manipulación y logística de los vinos. A orillas del Garona está el magnífico Centro de Arte Contemporáneo (CAPC).

El Gran Teatro. El auditorio es famoso por su acústica excepcional, su espectacular escalera fue imitada más tarde por la Ópera Garnier de París. Este imponente edificio de 88 metros de largo tiene un estilo neoclásico.

Basílica de San Michel. Tardó 200 años en construirse, sus obras se iniciaron en 1350. El edificio consta de tres naves y tiene una hermosa estatua de Santa Úrsula de los Penitentes, en una de las capillas laterales. El campanario, construido entre 1472 y 1492, es el más alto de Francia con 114 metros.

Museo de las Bellas Artes. Está en dos de las alas del Hotel de Ville (ayuntamiento) y cuenta con una gran colección del renacimiento, con obras como las de Tiziano, Veronés, Rubens, Delacroix, Corot, Renoir, Matisse y Boudin.

Catedral de Saint-André. La nave de esta inmensa iglesia fue construida en el siglo XI y modificada 200 años más tarde. El coro gótico y los travesaños se añadieron en los siglos XIV y XV. La escultura medieval de la Porte Royale tiene una imagen del Antiguo Testamento.

 

Ubicación: